Estimados, me dirijo a ustedes en búsqueda de consejo en el particular problema emocional que tenemos en nuestra familia, que seguramente es también el problema de muchas otras familias por lo menos aquí en España. Durante los últimos 14 años, llenos de cambios y desafíos, a mi lado primero, y como parte de mi familia después, siempre ha estado Darko, un precioso y generoso sabueso de transilvania de patas cortas. Por desgracia hace unos meses nos dejó. Sabía que antes o después tendría que pasar, pero nunca estás del todo preparado. Mis hijos quieren un nuevo perro, mi mujer piensa que nos vendría a todos bien, la casa esta muy vacia sin Darko, pero yo la verdad no se si estoy preparado y si podria aceptar otro perro que no fuera él.
Querido Blackie: Lo primero darte mis condolencias. Nosotros en mi casa no hemos tenido animales de compañía -a parte de la típica tortuga- pero se por mi hermano la situación por la que estáis pasando. Un perro al final es como un miembro más de la familia. Y digo como porque la verdad hay que tener claro que por mucho cariño que les tomemos y por muy importantes que sean para nosotros al fin y al cabo son animales, viven mucho menos que nosotros, en algún momento nos van a dejar y la familia tendrá que enfrentarse a esa pérdida. Mi hermano decidió que a pesar de lo mucho que querían a su perro, y precisamente porque lo querían tanto, lo mejor para todos, y especialmente para sus hijos, sería tener otro perro. Todo en esta vida, por desgracia, viene y se va y para los niños es bueno que aprendan a dejar ir y a aceptar de nuevo.
Menudo drama por una mascota. Lo siento, y no quiero faltaros al respecto, pero de verdad me parece demasiado. Un perro es un perro, es un animal, una mascota, que si, bien, te hace compañia, te da cariño, pero no veo el sentido de “personificarlo” y tener hacia “ello” esos sentimientos. Lo siento pero no lo entiendo. Mi madre cuando se divorcio compro una gata. La verdad que le vino genial: Le llenaba su tiempo y su energia, tenia algo de que cuidar y por lo que sentirse util y asi no le daba mas vueltas a la cabeza sobre todo lo del divorcio. Ademas asi no se sentia tan sola cuando yo no estaba en casa. Pero eso es todo. Es como un libro de autoayuda. Te ayuda, pero no es un amigo, es solo un libro. La gata se murio hace dos años y ella tambien empezo con la misma historia que estais contando. Yo le traje un gato y a la semana ya estaba encantada. No es que se hubiera olvidado de la gata, pero el gato le daba lo que la gata le había dado antes. Todos nuevamente felices.