¡Buenas noches! Os escribo, estimados lectores, porque no puedo dormir y quiero hablar con alguien de algo que me pasa desde hace un tiempo. Tengo la sensación de que alguien me persigue y no hay manera de quitarme esta paranoia. El año pasado tuve un novio que me espiaba y creo que me pasa esto por su culpa. Me seguía cuando volvía del trabajo hasta entrar en el edificio. Si no lo hacía él , mandaba a sus amigos. Os parecerá raro, pero este hombre estaba obsesionado conmigo. Me costó romper con él y todavía le tengo miedo. He cambiado de ciudad, pero temo que me ha encontrado.
Si todo lo que nos estás contando es verdad, tu comportamiento es lo más normal del mundo. Has tenido muy mala suerte de encontrarte en tu camino gente como tu ex novio. Tienes que aprender que todo ha pasado y no volverá a pasar jamás. Ya estás lejos de este hombre y no te encontrará jamás. Debes buscar nuevas amistades para poder salir y para poder pasar página. No todos somos iguales, lo sabes de sobra. Si hace falta, busca un grupo de apoyo, un grupo donde conocerás gente que ha pasado por lo mismo que tú. ¡Mucho ánimo, Luisa!
Yo creo que todo está claro, todo lo que te pasa, te pasa por culpa de este ex novio que has tenido. Mira que hasta hace poco pensaba sobre mí mismo que era la persona más repugnante que había en el mundo por ser infiel. Lo más repugnante es hacer a una persona sentir miedo, hacerle la vida imposible. Yo no sé si mi ex mujer siente miedo a la hora de tener relaciones con su actual pareja, miedo de ser engañada otra vez, espero que no. Me siento culpable, pero ya no me siento un monstruo. Creo que deberías pedir ayuda a alguien cercano.
He pasado por algo parecido, fue hace 20 años, más o menos. Un chico se había obsesionado conmigo y me seguía a todas partes. Yo era amiga suya, le di la oportunidad de ser mi pareja, pero no supo controlar sus celos y empezó a maltratarme. Rompí enseguida con él, pero no sirvió para nada. Me buscaba, me seguía e incluso hablaba con todos mis pretendientes para apartarlos de mí. Lo denuncié a la policía, pero tenía un amigo ahí que le ayudó, incluso me acusaron a mí de mentirosa. Lo pasé muy mal. Tuve que mudarme a otra ciudad. Todavía aparece en mis pesadillas nocturnas. Es difícil superar algo así, pero poco a poco…