Estimados lectores, mi novia sufre depresión tras la muerte de su padre y no sé cómo ayudarla. Es una situación muy difícil porque eran muy unidos. Su padre murió hace un mes, es una cosa reciente. Intento ayudarla, pero últimamente me está evitando, parece que no quiere ver a nadie. Su madre me dice que come muy poco y apenas duerme. Estoy muy preocupado por ella y no encuentro ninguna solución, por esto he pensado que es buena idea escribir aquí. Ella tiene 17 años, demasiado joven para sufrir esta pérdida. Si alguien ha pasado por algo parecido o tiene experiencia en estas cosas estaría agradecido.
Yo he perdido a mi hermano mayor cuando tenía 18 años. Ha sido muy duro, pensaba que nunca hablaría de esto. Toda la familia estaba hundida y ha sido difícil de superar. Es difícil romper un vínculo tan fuerte, duele demasiado. Esto nunca se supera, pero con el paso del tiempo lo llevamos un poco mejor. Tu novia necesita mucho amor. Ve a su casa todos los días y distráela. Háblale como amigo, no como novio. A mí me ayudó mi mejor amigo a salir poco a poco de todo esto. Hay personas que nacen para ayudar, personas con un corazón de oro. ¡Déjala que llore en tus brazos sin decir nada, ayuda más de lo que piensas!
Yo perdí a mi madre muy joven y no caí en la depresión gracias a la novia que tenía en aquel entonces. Mi novia y mis amigos me ayudaron mucho, nunca olvidaré lo que han hecho por mí… Ella me visitaba todos los días y me dejaba llorar en sus brazos, me escuchaba y me daba todo el cariño que necesitaba. Para mí, mi madre ha sido todo. Ella me enseñó todo lo que sé, ella me apoyó en los estudios etc. Yo le contaba a mi novia todo esto y ella me escuchaba… Toda mi vida me acordaré de ella y de su apoyo. ¡Ve a su casa todos los días , escúchala y abrázala!
¡Hola, buenas tardes a todos! Yo perdí a mi primer novio cuando tenía 25 años. Ha sido todo muy duro, he estado a punto de casarme… Mi familia me ayudó a salir adelante. Gracias a mis padres y a mis hermanos he conseguido superar la muerte del amor de mi vida. ¡2 años después, desgraciadamente, se murió el padre de mi hija. En aquel entonces nadie pudo consolarme, tuve que acudir a un profesional. Necesitaba la ayuda psicológica porque estaba embarazada y no sabía lo que iba a pasar con mi vida. Me costó mucho entender que la vida es así, que nosotros no somos dueños de nuestros destinos. ¡Visita a tu novia todos los día , seguro que te necesita a su lado!