Le he sido infiel a mi novia. ¿Se lo confieso o mejor no?

Ya os he hablado en varias ocasiones sobre este tema. Como sabéis, yo engañé a mi ex mujer y luego se lo confesé. Mi conciencia quedó libre… ¡igual que yo! Se vengó de mí y me dejó. Si quieres conservar esta relación es mejor callarte, nadie perdona una infidelidad sin cobrársela. A veces toca vivir con la conciencia cargada para evitar males mayores. También te digo que no es nada fácil callar algo así. ¡Sobre la chica en cuestión, no te fíes! Mi primo engañó a su mujer con otra y resulta que en un viaje se hicieron amigas y, hablando de aventuras, esta chica le habló de él. ¡Otro divorcio más!

Yo pienso que deberías contarle la verdad. Construir algo sobre la mentira es como hacer un castillo de naipes en un barco que navega sobre aguas turbulentas. Yo se lo confesaría. Nunca he sido infiel, pero alguna vez he hecho algo que a lo mejor no le gustaría a mi pareja y me mata esconderlo. Una infidelidad es algo grave, no se debe esconder. Veo que sois jóvenes y no tenéis hijos, tenéis la oportunidad de empezar otras relaciones o de empezar de nuevo. Creo que es lo correcto, de otra manera vas a estar toda la vida pensando en la infidelidad.

Pienso que no es fácil contar la verdad, yo me lo pensaría dos veces. Si tú piensas que nunca se enterará es mejor callarse. Si se lo confiesas le destrozaras la vida, sobre todo si eres su primer amor. Es mejor aprender a vivir con la conciencia sucia que hacer daño a otras personas. ¡A veces la mentira es necesaria, amigo mío! No me gustaría ser engañada por nadie, pero a veces prefiero no saber ciertas cosas. ¡No hay nada mejor que vivir en la ignorancia! Siempre he pensado que los sabios son hombres que sufren demasiado. ¡Es la cruda realidad!

He pensado toda mi vida que la verdad es un tesoro y siempre lo he defendido. Ahora sigo defendiendo la verdad, pero he aprendido que hay momentos de nuestra vida cuando la mentira puede llegar a salvar vidas, a mantener la ilusión etc. Inventar un Papa Noel y unos Reyes Magos hacen la vida de un niño feliz, igual de feliz que un moribundo que piensa que llagará en el paraíso. Es muy difícil saber cuándo hay que mentir y cuando hay que decir la verdad. No sé lo que haría en tu caso porque pienso que no llegaría a estar en tu caso. Pero he vivido demasiado para saber que no hay que decir nunca jamás. Yo creo que deberías buscar la respuesta en tu interior y preguntarte que pesa más. Yo se lo confesaría , dadas las circunstancias, pero yo no soy  la afectada.

Yo creo que deberías confesar tu infidelidad, por lo menos sé sincero en esto, ya que has hecho lo que has hecho. Sabéis de sobra lo que pienso sobre las infidelidades. A mi si me engaña puedo tomar decisiones drásticas. No es broma, yo prefiero vivir solo en la cárcel que traicionado por la persona querida. Sé lo he dicho a mi mujer estos días, ya que hablaba tanto de sus amistades… No entiendo porque una mujer o un hombre tenga relaciones de amistad con personas de sexo opuesto. ¡No existen estas amistades, siempre hay otro interés!  ¡No os engeñéis!

¡Yo creo que lo que está hecho, hecho está!  ¡Has cometido un error, no cometas otro! Si le cuentas la verdad a tu novia nunca te va a perdonar, lo sé de sobra. Yo una vez le he sido infiel a un novio que tenía y no le conté nada durante mucho tiempo. Pero se enteró cuando lo sabía todo el mundo, yo tenía un vicio con el otro chico y ya no me escondía de nadie. Tú caso es distinto, puedes ocultárselos sin más porque no volverá a suceder. ¡Nadie perdona una infidelidad, tú sabrás lo que estás dispuesto a perder!