Todas mis relaciones han sido horribles ¿por qué siempre acabo con los hombres equivocados?

Querida Andrea, lo que comentas puede tener muchas lecturas e interpretaciones. Cuando dices que siempre acabas teniendo relaciones con la persona equivocada, ¿A qué te refieres exactamente? ¿Podrías ser más precisa? Entiendo que son personas que, como dices, no te hacen feliz y encima te abandonan, y que te preguntas porqué las atraes, pero quizás deberias preguntarte también porqué son “personas equivocadas”. Puede ser que lo que realmente sea equivocado es tu imagen o tus expectativas de esas personas, o que sean muy elevadas. O sea, o que esperes mucho de ellas o que esperes algo que no son. Es posible también que no tengas muy claro lo que quieres, por eso no sepas escoger muy bien a quien aceptas y a quien no, ¿verdad? Yo, sinceramente, tengo la sensación que todo esto tiene más que ver contigo que con los hombres y su atracción hacía a tí. A mi, por ejemplo, me ha costado mucho saber quién soy y lo que quiero, así como aprender a no esperar de mis parejas lo que no pueden ser.

Cha_pelus, en cierto modo tienes razon; puedo decir que a mi me ha pasado lo mismo que a esta chica, es decir, he tenido muchas relaciones que han acabado mal o muy mal cuando de verdad tenia muchas esperanzas en ellas, pero la verdad que ha sido porque, a pesar de que yo he tenido siempre claro como tenía que ser mi "Principe Azul", he aceptado tener relaciones con personas que no estaban ni cerca de ese "ideal", pero es que, por desgracia, en mi círculo social no he podido encontrar personas mejores. Siempre he querido dar una oportunidad, con la esperanza de que con el tiempo y trabajo por mi parte esa persona estaría, poco a poco, más cerca de mi ideal. Pero hasta ahora no ha sido así.

Pues claro que no ha sido así, ni puede ni debe serlo! Yo tuve una novia que iba en el mismo plan: no eres perfecto pero no hay ningún problema, estás lo suficientemente pillado por mí como para que te dejes “modelar” a mi gusto. Al principio la cosa era más sutil, pero como no surtía efecto, la tía empezó a presionarme y hacerme chantaje emocional de maneras diversas. Al final todo era que yo no la quería suficiente y que no estaba dispuesto a cambiar por ella, que no tenía ningún interés en la relación, etc. Y luego empezó a hacerme chantaje con el sexo, a intentar ponerme celoso, etc. Lo peor es que sigo convencido de que esto las mujeres lo hacéis hasta por instinto… ¿y qué puede hacer un hombre entonces? Pues un día te das cuenta del pastel y... adiós!

Gracias por vuestros comentarios pero mi problema está a otro nivel: no es que las parejas que escoja, porque no hay donde elegir, se alejen de mi príncipe azul y yo los intente cambiar etc., sino que siempre acabo con hombres que claramente no pueden hacerme feliz… esos son los hombres que me atraen y a los que atraigo fisicamente: Hombres mayores que yo, incluso mucho más mayores que yo, generalmente casados, físicamente fuertes, corpulentos, y generalmente bien situados económicamente, pero no necesariamente bien educados o inteligentes. Sé que es triste, sobre todo así escrito, pero es la verdad: Ha habido chicos muy educados, inteligentes, buenos e interesantes que han querido salir conmigo, pero no puedo verlos más que como amigos, no siento ninguna atracción hacia ellos. Os debo parecer una enferma...

No mujer, de enferma nada, quizá un poco masoquista. Le pasaba a muchas de mis amigas: es lo del “macho alfa”, lo del hombre fuerte, dominante, ganador nato, junto al cual sentiros seguras y protegidas, hacia el cual vosotros os comportáis como su madre, buscando a ese niño travieso falto de amor, y buscando que ese niño os ame y respete solo a vosotras, y que sea fiero y rudo para con todos los demás. Varias de mis amigas se han encontrado en situaciones de violencia doméstica por ello. Es un poco el punto autodestructivo y bohemio de jugar con fuego, de gustarme lo que conlleva riesgo y me pone en peligro, como la gente que se hace deportes extremos. Creo que una charla con un psicoanalista (argentino si es posible) no te vendría nada mal.

Yo también caí en esa trampa. Me casé con el más guapo, con el más chulo, con la peor persona. Como ya he escrito alguna vez yo también me guíe por la belleza y la atracción física, por el hecho de que parecía un hombre con carácter, confianza, seguro de sí mismo, un ganador y ya ves, todo fachada. Pague bien caro mi error. Lo que te ha pasado, Andrea,  con ese tipo de hombres, puede decirse que ha sido incluso una suerte:  imagínate que sería de ti si estuvieras casada ahora con alguno de esos desalmados. Estoy Cha_pelus, quizá no estaría de más que hablaras con un psicólogo para ver de dónde te viene esa atracción y esas necesidades. A lo mejor tienes que trabajar en tu autoestima en lugar de buscar a alguien que te proteja.