Estimados lectores y colaboradores, os escribe una mujer con la conciencia cargada. Mi mejor amiga se ha quedado viuda hace dos años y todavía no ha superado la muerte de su marido. Dice que ella no puede rehacer su vida, que ella piensa estar sola hasta que se muera. Piensa que su marido era un hombre maravilloso que la quería y la respetaba, pero ella no sabe que su marido le había engañado hasta con su mejor amiga, aquí presente. Me duele verla así, pero tampoco quiero hacerla sufrir contándole la verdad. No le he contado nunca que su marido le ha estado engañando. ¿Piensan ustedes que debería decirle algo ahora o mejor dejar las cosas como están?¡Gracias! Mi conciencia me pesa , pero el miedo de perder a mi amiga me mata.
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Amparo, yo creo que esta pobre mujer merece saber la verdad y seguir con su vida. No puede estar sufriendo por un hombre que le ha hecho todo esto. Ten un poco de dignidad y cuenta la verdad de una vez por todas. A lo mejor esta mujer todavía está a tiempo para ser feliz, de conocer a alguien que merezca la pena. Ya sé que tienes miedo de la verdad y sobre todo de perder a tu amiga, pero con el tiempo ganarás su respeto. A mí me da muchísima rabia ver como se consumen algunas personas por gente que no merece la pena.
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Yo también pienso que deberías guardar silencio. No solo porque no te beneficia, también por tu amiga. Ella es feliz como está, ¡no le amargues la existencia! Yo entiendo que una conciencia cargada pesa demasiado, pero es mejor así. No puedes cambiar el pasado, pero puedes cambiar el futuro. Por lo menos tienes a tu amiga y la oportunidad de estar a su lado en los momentos difíciles. Bueno, lo malo es que la otra no quiere rehacer su vida. No sé qué edad tiene, pero si es joven anímala que busque pareja. Debería ayudarla un poco. Dile que a veces es bueno tener un amigo especial.
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Amparo, no digas nada, ¡por Dios! Cuando yo tenía 19 años todos los novios de mis amigas me buscaban. Con los más guapos he tenido yo buenas aventuras y todavía no se ha enterado nadie. ¡Total, son unas horas de placer y nada más! Una vez tuve mala suerte porque uno de ellos le confesó a su novia la verdad. Ella era amiga mía y se enfadó mucho. Después de unos meses ella le dejó por otro y hoy en día me lo agradece. Tú no digas nada, está muerto y no creo que tenga algo escrito sobre sus amantes. ¡No te preocupes por la conciencia!
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