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¡Hola a todos! Tengo un problema y me gustaría escuchar vuestros consejos. Soy incapaz de hacer amigos en la vida real. No sé si me entendéis. Por internet hago amigos con mucha facilidad, pero en la vida real no soy capaz de abrir la boca. No sé por qué, pero me da la sensación que la gente huye de mí. Cuando estoy delante del ordenador me siento poderoso y no tengo miedo al rechazo. Cara a cara todo es más difícil, la gente se va y me deja con la palabra en la boca. He pensado que a lo mejor físicamente decepciono y por esto la gente huye de mí. Necesito vuestra ayuda. ¡Gracias!

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¡Jajaja! A mí me pasa todo lo contrario. ¡Yo no soy capaz de tener amigos por internet, no me manejo bien! Estoy escuchando a todo el mundo hablar de esto y no me veo. Algunas amigas mías han encontrado hasta pareja por internet y no les ha ido mal. Pero yo soy incapaz de tener relaciones así. Además, me parece una tontería. Tú deberías dejar el internet y salir a la calle. Encerrado no harás nada bueno. Las verdaderas amistades son las que te hacen sentir algo real. En internet no sabes ni con quien estás hablando. Otro día me pasé por mi hermana en internet y la gente me contestó rápidamente.  

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¡Yo creo que no confías demasiado en ti mismo y te escondes detrás de la pantalla, querido amigo! A mí a veces me pasa algo parecido.  Parece que tengo más confianza con las personas que conozco en internet. Las que tengo cerca me intimidan, debo reconocerlo. He conocido a unos de mis amigos de internet y me comporté de manera muy extraña. Después de unos días del encuentro empecé a pensar que decepciono en persona. Todavía pienso que he cometido un error conocer de verdad a esta persona. Todo esto porque tengo miedo de perderla. He hablado con un amigo mío psicólogo y me ha dicho que debo pensar en positivo. Me ha dicho que, si la persona en cuestión ha cambiado la opinión sobre mi después de conocerme en persona, no merece la pena.

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Yo he hecho amigos en todos los sitios, hasta en Internet. Bueno, amigos de verdad tengo muy pocos, pero no necesito tener más. Mi primo es como tú, habla conmigo todos los días por internet y luego nos encontramos cara a cara y no me dice nada. Entiendo que es muy tímido, pero debería ser más abierto conmigo.  Creo que por internet os sentís en vuestro mundo y por esto no os cortáis. En la vida real hay dos ojos que te miran, una sonrisa que te puede llegar a intimidar etc. Es más difícil que estar delante de una pantalla.  ¡Pero tu tranquilo, con el tiempo tendrás amigos de carne y hueso!

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Andrés, entiendo tu preocupación. El ser humano debe vivir en sociedad. Hoy en día todo ha cambiado y las relaciones por internet forman parte de nuestra vida. Es muy bonito disfrutar en compañía de los amigos, pero a veces no encontramos las personas adecuadas. A veces pensamos que somos nosotros incapaces de hacer amistades, sin embargo, no es así siempre. Te lo digo por experiencia propia. Yo delante de ciertas personas no puedo ser yo y no me encuentro nada bien. Luego, cuando conozco una persona encantadora, quiero disfrutar tanto de su compañía que a lo mejor le saturo. Yo creo que deberías buscar las repuestas dentro de ti. ¡Nunca dejes de ser tu para conseguir más amigos!

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¡Gema, ya somos dos! Buenos, realmente yo hago amigos hasta en el infierno. Me encanta conocer gente nueva, sobre todo chicas. Cuando era muy joven no existía internet y me pasaba el día paseando, montar en bici, ir a todos los sitios donde había gente. ¡No sé ni cuantas películas he visto a lo largo de la vida! Yo creo que una sonrisa abre todas las puertas. Es la clave del éxito. A mí me gusta contar historias y muchas veces me quedaba en el medio de todos contándoles chistes y cosas que me han pasado. Se quedaban todos mirándome como si de un circo se tratara.
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¡Buenas tardes, Andrés! Acabo de llegar a casa de un cumpleaños y he visto como la gente se relaciona según sus aficiones, su trabajo o la clase social. Parece que los demás no encajamos en su mundo y no quieren nada de nosotros. Me sentí ridícula porque cada vez que intentaba hablar me cortaban y seguían hablando entre ellas. Me ha tocado estar al lado de unas profesoras y he quedado decepcionada. He visto que más allá de su mundo no quieren ver y me duele. Son los que se ocupan de la educación de nuestros hijos y deberían ser más empáticos. ¡Ahora entiendo porque algunos hacen amistades a través de internet!
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